Uno de esos días...
Podría decir que estoy triste y mentir descaradamente sobre el rostro del asco,
sostenerme las mejillas perplejas y remover algunas lágrimas,
podría sentarme en sus piernas
sonreír sin gracia,
el sol seguirá resplandeciente sobre su cabeza sucia,
sobre su piel de barro,
el viento soplará sus palabras cortantes, crueles
el viento cargará los cuchillos en sus silencios
será uno de esos días en que llueve sólo aquí adentro.